La Personalidad
El término Personalidad procede del término latino persona, que se refería a la máscara que los actores utilizaban en las representaciones teatrales. Cada máscara estaba asociada con el tipo de carácter del personaje que representaba.
Es un término difícil de definir, pero los elementos básicos en que todos los investigadores coinciden son:
- La personalidad es un constructo psicológico hipotético, inferido de la observación de la conducta.
- Engloba unos rasgos o disposiciones internas, que además incluyen elementos como cogniciones, motivaciones y estados afectivos. Estos rasgos son relativamente estables a lo largo del tiempo, y consistentes de una situación a otra, lo que permite predecir la conducta de los individuos.
- La personalidad es algo distintivo y propio de cada individuo.
- Es la forma característica de pensar y comportarse del individuo a su entorno (Allport, 1961; Costa y McCrae, 1994).
La personalidad de un individuo se inicia con componentes biológicos innatos, que a lo largo de la vida se van canalizando por la influencia de múltiples factores. Así la personalidad sería el patrón resultante de conductas, cogniciones y patrones emocionales (Cloninger, 2009).
La personalidad está integrada tanto por estructuras como por procesos, y refleja tanto la naturaleza (genes) como el aprendizaje (Pervin, 1998).
Una definición que engloba los aspectos más destacados es que la personalidad es la forma de pensar, percibir o sentir de un individuo y está integrada por aspectos más estables (rasgos) y elementos dinámicos (cognitivos y afectivos), que determinan la conducta del individuo.
Los rasgos de personalidad son los aspectos más estables y recogen la consistencia de la respuesta de un individuo ante distintas situaciones, por lo que son muy difíciles de cambiar.
Golberg (1993) halló que existen elementos constitutivos de la personalidad, y que ésta puede categorizarse en cinco grandes rasgos, también llamados factores principales. Cada persona presenta una puntuación en cada uno según el grado en que cada individuo tiene esa característica en mayor o menor relevancia, y eso es lo que le define. Son los siguientes:
Golberg (1993) halló que existen elementos constitutivos de la personalidad, y que ésta puede categorizarse en cinco grandes rasgos, también llamados factores principales. Cada persona presenta una puntuación en cada uno según el grado en que cada individuo tiene esa característica en mayor o menor relevancia, y eso es lo que le define. Son los siguientes:
- factor O (apertura a las nuevas experiencias).
- factor C (responsabilidad).
- factor E (extroversión).
- factor A (amabilidad).
- factor N (neuroticismo o inestabilidad emocional).
Otro modelo, no menos importante, es el de Cattell. A través de sus investigaciones y utilizando el análisis transaccional, halló 16 factores o rasgos fundamentales que subyacen a la personalidad humana.
Comentarios
Publicar un comentario